El uso de estrógenos locales después de la menopausia reduce el dolor durante el acto sexual y mejora bastante la vida sexual, según los resultados de un estudio realizado por la North American Menopause Society (NAMS) y publicado en internet en la revista Menopause.

Para el estudio, que forma parte del estudio a mayor escala CLOSER (Clarifying Vaginal Atrophy’s Impact on Sex and Relationships, Estudio del impacto de la atrofia vaginal en la vida sexual y las relaciones), se entrevistaron a aproximadamente 1000 mujeres de 55 a 65 años con atrofia vulvovaginal (AVV) y a sus parejas masculinas.

Previamente al uso de estrógenos, el 58 por ciento de las mujeres refería evitar las relaciones sexuales a causa del dolor, y el 68 por ciento refería haber perdido el deseo a causa del mismo. Un porcentaje incluso mayor de hombres (78 por ciento) manifestaba que las molestias vaginales de su pareja les hacían evitar las relaciones sexuales. Alrededor de una tercera parte de los hombres y las mujeres ya no mantenían relaciones sexuales.

Tras el tratamiento, la mayoría de las mujeres y los hombres refirieron que el acto sexual era menos doloroso para ellas y para su pareja, y más del 40 por ciento de las mujeres y los hombres afirmaron que las relaciones sexuales eran más satisfactorias. El 29 por ciento de las mujeres y el 34 por ciento de los hombres afirmaron que su vida sexual había mejorado. Alrededor de un tercio se sentía más optimista acerca del futuro de su vida sexual, y un número similar se sentía más unido a su pareja.

En mi consulta es habitual que recete estógenos locales a mujeres en ésta situación que posteriormente se sienten bastantes satisfechas con dicha decisión.
Un saludo.