Falta educación sexual universal, de calidad y fomentada para garantizar los derechos sexuales y reproductivos desde los centros educativos.

El 19% de los alumnos de segundo de ESO –a partir de 14 años– ha tenido relaciones sexuales con penetración, según los resultados del impacto de las acciones de Sida Studi realizadas en el curso 2014-20115 a más de 550 jóvenes en Cataluña de este curso y de Bachillerato –a partir de 16 años–.

El estudio alerta de la falta de educación sexual universal, de calidad y fomentada para garantizar los derechos sexuales y reproductivos desde los centros educativos, ha informado Sida Studi en un comunicado.

En los alumnos de segundo de ESO, el 25,7% no había tenido «ningún contacto sexual», mientras que el 19% habían mantenido relaciones sexuales con penetración alguna vez en la vida en el momento de la intervención si detectar diferencias en la prevalencia de prácticas sexuales entre chicos y chicas.

Una de las diferencias detectadas es respecto a la masturbación, ya que el 95,5% de los chicos dice haberla practicado frente al 30,8% de las chicas, y en los besos y caricias, un 87,8% ante un 68,5%, respectivamente.

En el caso de Bachillerato, el 42,4% de los menores había realizado «penetración vaginal» alguna vez en la vida con una proporción ligeramente más alta entre las chicas –49,1% ante el 33,3% de los chicos–.

Los alumnos de segundo de Secundaria que habían tenido relaciones con penetración lo habían hecho a los 13,6 años de media, mientras que la edad de inicio de las chicas fue de 14,1 años; en Bachillerato, la edad de inicio fue de 15 años sin diferencias entre géneros.

Respeto al sexo oral, el 24,7% de los alumnos de 14 años lo había practicado –a los 11,9 años los chicos y a los 13,4 años las chicas–, y el número de jóvenes que había realizado esta práctica también era superior en Bachillerato.

Además, el 73,3% de los alumnos de 14 años reconoció que no utilizaba nunca el preservativo a la hora de practicar sexo oral.

El método anticonceptivo más utilizado ha sido el preservativo en el 87,8% de los casos, tanto en chicas como en chicos, y el uso en Bachillerato era más elevado, si bien el 22,9% afirmaba haber realizado la ‘marcha atrás’.

En la última relación sexual, el 82,9% de los chicos había utilizado el «preservativo para pene», cifra que se elevaba al 84,2% en el caso de los estudiantes Bachillerato, que argumentaban el no uso por falta de disponibilidad por una relación imprevista y por el hecho de utilizar otros métodos anticonceptivos.

Las principales ventajas de utilizar el preservativo que explicaban eran evitar el VIH/ITS, en el 94,3% de los casos, y prevenir embarazos, en el 88,7% de los casos, en ambas edades.

Las dificultades más habituales en el uso del preservativo fueron el miedo a que se rompa, mientras que perdía importancia la vergüenza a comprarlos, y en el caso de los alumnos de Bachillerato se añadían: la pérdida de sensibilidad, el hecho de «cortar el rollo», y una cuarta parte declaraban que el hecho de llevar preservativos encima comporta que otras personas creyeran que siempre quieren hacer sexo.

Un saludo!!!